En toda organización siempre hay personas cuyo compromiso inquebrantable moldea su carácter. Regina es una de esas personas. No teme defender firmemente aquello en lo que cree. Con una inusual mezcla de empatía, diligencia y asertividad, se ha convertido en la piedra angular de la cultura corporativa en temas de cumplimiento normativo, lo que le ha valido el primer O.S.C.A.R. (por sus siglas en inglés, Outstanding Supporter of Compliance and Responsibility) como promotora destacada de materia de responsabilidad y cumplimiento normativo.

Desde 2004, Regina fomenta la concienciación a través de la organización periódica de cursos de actualización sobre estándares laborales, de salud y de seguridad, así como derechos humanos. Ella considera que estos sesiones de entrenamiento son oportunidades para reforzar los valores que garantizan la seguridad, el respeto y el empoderamiento de las personas. De esta manera, Regina ayuda a integrar el cumplimiento de las normas en el ADN de Fazendas Brasileiras, no como una lista de tareas por cumplir, sino como una mentalidad compartida.

Su influencia se nota especialmente en aquellas áreas donde la inclusión todavía está evolucionando. En un ambiente predominantemente masculino, Regina se asegura de que las voces de las mujeres no solo sean escuchadas, sino también tomadas en cuenta activamente. Ella promueve persistentemente la equidad, asegurándose de que nadie se sienta ignorado. Sus colegas la describen como una confidente fiable, alguien que escucha sin juzgar y actúa con integridad.

Durante muchos años, Regina ha sido indispensable en su rol como Compliance Representative. Recientemente, aunque su rol oficial haya evolucionado, sigue siendo un puente fundamental entre los trabajadores y la gerencia. Durante sus visitas periódicas a la plantación, escucha y observa atentamente. Cuando surgen desafíos, ella se compromete a garantizar que todas las voces sean escuchadas y colabora con la gerencia para encontrar soluciones. Una de sus contribuciones más importantes fue la expansión de los buzones de sugerencias anónimas, brindándole a todos los empleados un canal seguro para poder expresarse.

Los mecanismos de quejas suelen ser considerados meras formalidades. Regina los convierte en algo humano. Entiende que la confianza no se construye solo mediante políticas, sino también a través de la presencia. Al reafirmar estos sistemas y hacerlos más accesibles, fomenta una cultura donde la transparencia y la responsabilidad pueden prosperar. Su trabajo nos recuerda que el cumplimiento de las normas es, ante todo, una cuestión de relaciones.

El retrato de Regina refleja un liderazgo firme y con propósito. Al honrarla con nuestro O.S.C.A.R., no solo celebramos lo que hace, sino quién es y los valores que nos ayuda a vivir cada día.